Cada una de mis canciones es un parto de mi alma,
cada una de mis canciones es un trance en mi vivir.
un retazo de mi vida, un giron de mi existencia
un recuerdo que perdura, un ayer que vuelve a mi.
Y por eso cuando canto, canto siempre mis canciones,
porque cuando yo las canto... mi vida vuelvo a vivir.
Y asi voy reviviendo infantiles amores, el noviazgo primero, la emoción del primer
beso,
nos miro adolescentes , llenos de amor y miedo, tras la dulce experiencia de amar por vez
primera.
Luego vienen los años de mi vida bohemia, amores que llegaron, vivencias pasajeras,
disfruto cada verso de mi vida poeta, de mis ganas de artista, de mi afan de cigarra,
la integridad de mi alma... toda la he puesto en ellas.
Y por eso cuando canto, canto siempre mis canciones,
porque cuando yo las canto... mi vida vuelvo a vivir.
(Publicacion en Internet: 26.10.2002. por Pablo Azael.)
Me gusta tanto amarte amor, me gusta tanto amarte asi,
me gusta amarte a la manera como yo aprendí de ti,
con toda el alma, con alme y cuerpo, a la manera como yo aprendí de ti.
Me gusta tanto amarte amor, lo necesito tanto más,
yo sin tu amor no se vivir, me gusta tanto amarte así,
que si pudiera vivir por siempre, no lo quisiera si tengo que vivir sin ti.
Me gusta tanto amarte amor, me gusta tanto amarte asi,
amarte a fondo y sin medida, como yo aprendi de ti.
Me gusta tanto amarte amor, me gusta tanto amarte asi,
me gusta amarte a la manera como yo aprendí de ti.
Amarte al máximo de lo que da la vida,
el alma entera rendirte sin condiciones,
que cada instante sea un detalle consumado,
que cada entrega sea de contacto total.
Me gusta tanto amarte amor, me gusta tanto amarte asi,
amarte a fondo y sin medida, como yo aprendi de ti.
Me gusta tanto amarte amor, me gusta tanto amarte asi,
me gusta amarte a la manera ... como yo aprendí de ti.
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"Porque el hombre sólo nace esclavo de sus instintos y de su
ignorancia". Pablo Azael.
Porque no sabia leer hize barcos de papel con las paginas de un libro que una vez yo me
encontré.
Era un libro como aquel que leía el Padre Manuel, los domingos muy temprano, antes del
amanecer.
Una armada valerosa a formar me dediqué y al sucio charco del barrio muy contento la
llevé.
Repartí de aquellos barcos entre los chicos del barrio y jugamos a la guerra,
a la guerra sin cuartel.
y jugamos a la guerra,
a la guerra sin cuartel.
Y al que solo perdía un pie, de un mástil se le hacía un zanco,
y al que sólo perdia un brazo, de un gancho se le hacía un garfio.
Y al que sólo perdía un pie de un mástil se le hacia un zanco,
y al que sólo perdía un brazo, de un gancho se le hacía un garfio.
La ciencia iba reparando la furia de aquellos barcos y a la orilla de aquel charco...
lloraba el Padre Manuel.
Porque no sabia leer hize barcos de papel con las paginas de un libro...
como el del Padre Manuel.
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Antes de dormir, cada noche pienso en ti.
Y al amanecer, despierto pensando en ti.
Y voy repasando todos los detalles de nuestra primera ves,
fué maravilloso, fué maravilloso amarnos así.
Que a pesar de nuestras vidas ya vividas,
y nuestra experiencia en cosas del amor,
pudimos amarnos como si esa fuera nuestra primera vez.
Y asi te recuerdo a cada momento,
y te siento mía, solamente mía,
como aquella tarde en que nos amamos por primera vez.
Antes de dormir... cada noche pienso en ti.
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